En un poema de Noviembre de 1987 escribí
“Definitivamente el mundo no está hecho a mi medida: … la izquierda”
Hoy por la tarde tomé conciencia de que es el día Mundial de la Poesía. Así tuve ganas de revisar mi cuaderno rojo que aún existe y encontré ese escrito de cuando tenía 18 años.
Poco antes de esa declaración, tuve conciencia de mi condición de zurdo. Esta condición finalmente fue verificada algunos años después durante mis estudios de psicología cuando me fue aplicado un test de lateralidad indicando mi condición en ese momento de ambidextro.
Sin duda este auto conocimiento fue un gran descubrimiento personal que me fue útil en diferentes momentos.
Me fue útil por ejemplo durante mis estudios universitarios en una época en la que teníamos que anotar todo lo que los profesores escribían en la pizarra mientras yo alternaba en dos universidades (Universidad Nacional Agraria y Universidad Mayor de San Marcos en Lima) con unas 8 a 10 horas de clase por día. Entonces era muy conveniente y además relajante y divertido alternar cursos y días como diestro y como zurdo.
Algunos años después me fue útil también durante una prueba cuando hacía mi doctorado y tuve el brazo derecho enyesado por varios meses.
Posteriormente, sólo en algunas ocasiones he intentado ser un profesor zurdo, pues pese a mi competencia para escribir, siento que no podría sostenerlo y tendría que alternar distrayendo a los alumnos acerca de esa condición.
Pero la zurdez es un asunto serio, y lo es aún más para un zurdo tardío. Según datos de wikipedia, se estima que entre 85% y 90% de la población es diestra, de un 10% a un 15% son zurdos y un pequeño porcentaje es ambidextro. En ese sentido ser zurdo determina varias complicaciones. Pero no todo está dicho respecto a esta condición. La investigación no ha enfocado este asunto, tal vez precisamente por ser una condición que involucra un grupo minoritario.
Entre las cosas curiosas, mientras que interaccionar con un diestro no ofrece mayores dificultades pues no se compite en nada, es solo cuando se interacciona con un zurdo cuando ocurren los desencuentros por coincidencia al decidir el espacio donde ubicarse o por oposición cuando cada uno optó por una forma de adaptarse al mundo diestro.
Un ejemplo de esto último puede verse en el siguiente video en el que se aprecia como dos grandes cantantes brasileros Zezé di Camargo y Paula Fernandes se encuentran en un escenario y descubren que cada uno es zurdo (canhoto en portugués) y que cada uno tiene su forma de tocar la guitarra que fue pensada para diestros: uno invertiendo las cuerdas y el otro invertiendo la posición de la guitarra. No obstante el resultado es extraordinario.
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